Siempre fiesta es la historia de alguien que, como todos, trata de buscar la felicidad...Una historia del tiempo en que vivimos, de la realidad vista con ironía, de la búsqueda de la felicidad narrada en forma de cuento...La historia de una familia que vive en una fiesta constante...La familia de María que se reúne, como todos los años, para celebrar la noche de Navidad, en la que se habla de cosas engorrosas, inconvenientes, a veces incorrectas...Cuando finaliza la cena, María sufre un repentino ataque de realidad y la única forma de paliar su intensa tristeza, después de haber probado con ella todo tipo de terapias, es repetir la cena de Navidad con su marido y su familia y hacer como si no pasara nada...El mantenimiento del supuesto modo perfecto de vida acaba convirtiéndose en algo insostenible que termina descomponiendo el núcleo familiar... Una serie de acontecimientos se repiten y deforman llegando a rozar lo grotesco...y es que los silencios nunca mienten...
Todos perseguimos la felicidad, sin embargo, hay quien cree encontrarla en situaciones fingidas e historias congeladas que perduran con el tiempo.
Tras Café y Rebeldías Posibles, Siempre Fiesta completa el ciclo de esta trilogía imprevista. Una serie de historias “fabulosas” que narran con ironía algunas situaciones de la sociedad actual. Las dos primeras partes de la trilogía hablaban sobre el prohibicionismo excesivo y la resignación. Siempre Fiesta es otra fábula social que se centra en el tema del egocentrismo, la indiferencia y el conservadurismo, que llevado al extremo, puede llegar a convertirse en algo forzado y artificial.
Su intención es hacer del teatro una experiencia única. Y lo consiguen..."Hay una intención filosófica detrás de cada carcajada y eso es sano, que pensemos mientras reimos".
Vane
